Cada vez más, la sostenibilidad, la preocupación por la preservación del medio ambiente, es determinante a la hora de elegir un producto u otro, sea en el ámbito que sea. Cuando hablamos del hogar, que es un bien de larga duración y del que hacemos uso de manera constante, la sostenibilidad y eficiencia tienen todavía más importancia.
A la hora de hablar de ventanas sostenibles, debemos tener en cuenta dos aspectos: por una parte que nos ayuden a reducir el consumo energético del hogar, y en segundo lugar analizar si el producto es ecológico en sí mismo, según los materiales, su fabricación y su usabilidad.
En este sentido, las ventanas de aluminio son la opción más sostenible y ecológica, ya que este material es totalmente reciclable y además muy resistente.
Ventanas de aluminio, ventanas 100% reciclables
Es cierto que fabricar un marco de aluminio consume más energía que hacer uno de otro material como pueda ser el PVC. Sin embargo, hay que tener en cuenta que prácticamente no se utiliza aluminio nuevo, sino que este suele ser aluminio reciclado y procedente de otros productos.
Este material no es nada nuevo, de hecho su descubrimiento se remonta al siglo XIX, y a finales de ese mismo siglo se empieza a extraer el aluminio de la bauxita y a darle aplicaciones industriales. En la década de 1960, a pesar de que la sociedad carece de conciencia medioambiental, ya se comienza a reciclar y reutilizar el aluminio. Esto es porque el reciclaje de aluminio supone un ahorro del 95% frente a su extracción en estado natural. Es decir, cuando se recicla aluminio solo se consume el 5% de la energía que costaría obtenerlo nuevo de la bauxita.
Además, se puede reutilizar veces infinitas, por lo que el ahorro es impresionante. Es por eso por lo que el 70% del aluminio que se ha fabricado en los últimos 100 años de vida industrial sigue en funcionamiento.
De este modo, cuando sustituimos unas ventanas de aluminio, sabemos que no van a suponer un desecho, sino que son ventanas ecológicas y que tendrán una nueva vida útil. ¡Y qué vida…!
Las ventanas de aluminio también pueden considerarse ventanas ecológicas por su resistencia. Una ventana de aluminio tiene una vida útil muy larga, pero es que además lo hace sin desgaste. Los marcos de aluminio se mantienen como nuevos durante mucho tiempo, no importa lo inclemente que sea el tiempo o las condiciones a las que se les someta.
Otra ventaja de las ventanas de aluminio es su versatilidad. Son fáciles de diseñar e instalar, son muy manejables y nos permiten ofrecer soluciones para cualquier tipo de situación. Es fácil colocar una ventana de aluminio en cualquier lado, lo cual puede contribuir a un mejor mantenimiento del hogar y a mejorar la eficiencia energética cuando tienen rotura de puente térmico.
¿Cómo pueden ayudar tus ventanas a la eficiencia energética en el hogar?
Que unas ventanas sean eficientes desde el punto de vista del consumo energético quiere decir, básicamente, que nos ayuden a utilizar lo menos posible la calefacción en invierno y el aire acondicionado en verano.
Sin duda, unas ventanas ecológicas también son aquellas que contribuyen a la eficiencia energética del hogar. La manera en que las ventanas nos ayudan es bien contribuyendo al aislamiento térmico del hogar, o bien permitiendo el aprovechamiento de los elementos naturales para su climatización.
Hay unos materiales que son más permeables a nivel térmico que otros, es decir, por los que es más fácil que se escape el calor del hogar o entre el frío de la calle. En general, se puede decir que, el material PVC es más eficiente que el aluminio, ya que el plástico es un mal transmisor térmico y aísla de manera natural del frío y del calor. A esto se une la falsa creencia de que los cierres de las ventanas de PVC son más herméticos.
Pero la realidad es que las ventanas de aluminio ofrecen grandes prestaciones incluso en climas extremos, ya sean lugares en los que hace mucho frío o mucho calor. En Ventanas Cabañero, contamos con diversas gamas de ventanas de aluminio con altas prestaciones. La Gama Continental, por ejemplo, ofrece un alto aislamiento térmico y acústico en ventanas de aluminio. Son una opción ideal si buscas perfilerías versátiles y eficientes, ya que son ventanas en aluminio con rotura de puente térmico y/o la posibilidad de utilizar doble o triple acristalamiento.
Eficiencia y versatilidad con ventanas de aluminio
Las ventanas de aluminio son 100% reciclables y, además, pueden contribuir ampliamente a la eficiencia energética del hogar. Realmente es posible disfrutar de un alto aislamiento térmico, y encima hacerlo en espacios diversos de la casa, gracias a la versatilidad y facilidad de manejo de este tipo de ventanas.
Podemos, por ejemplo, instalar ventanas interiores o en espacios pequeños que ayudarán a ventilar y dar luz a la estancia. O podemos irnos al otro extremo; el aluminio permitirá reducir la perfilería a la mínima expresión y aprovechar grandes ventanales por los que podamos dejar entrar una gran cantidad de luz y calor natural. Y esto sin tener que renunciar a altas prestaciones. Las ventanas de aluminio son ecológicas en su esencia y en su uso, y nos ofrecen soluciones eficientes para situaciones diversas con un bajo coste y una larga vida.