En los últimos meses, la factura de la luz ha sufrido un importante incremento que está afectando poderosamente a la economía de numerosos hogares y negocios. Buena parte de esta subida depende de factores macroeconómicos, que difícilmente podemos controlar, pero sí hay varias medidas que están en nuestras manos y que podemos tomar para ahorrar en la factura de la luz de manera notable.
Los cambios en la tarifación de la electricidad han coincidido con el encarecimiento de la luz, lo cual ha creado bastante confusión, ya que es algo nuevo que llega en un momento delicado. En teoría, los cambios introducidos tienen el objetivo de que seamos más conscientes sobre nuestro consumo energético.
Tal y como apunta la OCU, existen varias formas de ahorrar con las nuevas tarifas de la luz, pero, además, nuestras ventanas también pueden hacer mucho por el ahorro energético en el hogar.
Elegir la ventana adecuada -tanto en cuanto a su formato como al nivel de aislamiento térmico que proporciona-, su correcta instalación y un buen uso en el día a día, son imprescindibles para mejorar la eficiencia energética en el hogar y conseguir un ahorro en la factura de la luz más que notable.
Cómo ahorrar en la nueva factura de la luz
El primer paso para conseguir ahorrar en la factura de la luz es entenderla. Últimamente, recibimos mucha información sobre la electricidad, el mercado de compraventa de energía o la nueva manera de tarifar, y esto, a veces, en lugar de aclarar conceptos, puede volverlos todavía más confusos.
La nueva factura de la luz afecta solamente a aquellas personas que estén en el mercado regulado, que son, eso sí, la mayoría. Esto quiere decir que es el gobierno el que establece la manera de tarifar la luz, aunque no su precio, ya que este depende principalmente del valor al que se compre la energía que luego se distribuye a nuestros hogares. Es en ese punto, sobre todo por el encarecimiento del gas, del que depende la mayor parte de la energía eléctrica en España, donde más ha subido la factura.
Ese precio de la energía varía cada día dependiendo del mercado, pero, tras los cambios en las tarifas, hay otros costes importantes, como el de la potencia contratada, que varían mucho entre unas horas y otras. Son los tres tramos de discriminación horaria de la factura de la luz:
- Horario Punta (el más caro): de lunes a viernes, de 10h a 14h, y de 18h a 22h.
- Horario Llano (precio intermedio): de lunes a viernes, de 8h a 10h, de 14h a 18h y de 22h a 00h.
- Horario Valle (el más barato): de lunes a viernes, entre las 00h y las 8h. Fines de semana y festivos, todo el día.
Además de intentar evitar que el mayor consumo eléctrico se produzca en las horas Punta, hay otras formas de ahorrar en la factura de la luz, como contratar la potencia adecuada o utilizar correctamente nuestros electrodomésticos.
Una parte importante del coste de la factura depende del término fijo que se cobra por la potencia contratada (que se multiplica por el precio que tenga el kilovatio ese día) y, a menudo, esta es mayor de la que necesitamos; sería bueno plantearse si realmente es necesario poder utilizar el secador, la lavadora, el microondas y el tostador todo al mismo tiempo. Seguramente que la respuesta sea que no, y si podemos poner todos estos electrodomésticos a la vez sin que salten los fusibles, probablemente tengamos más potencia contratada de la que necesitamos.
En cuanto al uso de los electrodomésticos, hay varios trucos para pagar menos en la factura de la luz. Por ejemplo, podemos utilizar programas ECO que ahorran energía, programar su uso, llevar un buen mantenimiento para que funcionen correctamente, evitar dejarlos en ‘stand by’ o controlar las temperaturas (por ejemplo, lavar la ropa a 40° supone un ahorro de hasta el 40%).
Importancia de las ventanas para ahorrar en la factura de la luz
Las ventanas son un puente entre el interior y el exterior, y esta posición hace que sean clave para el ahorro energético en el hogar. Si hacemos todo lo que hemos señalado antes, pero nuestras ventanas no son eficientes en cuanto a aislamiento térmico, ese esfuerzo se irá al traste.
Una mala instalación o un material que no sea el adecuado para nuestra climatología pueden suponer una fuga energética que se intentará compensar con un mayor uso de los sistemas de calefacción o aire acondicionado, lo que supone un gasto muy alto en la factura de la luz.
Para ahorrar en la factura de la luz de manera efectiva, merece la pena plantearse si es necesaria la renovación de las ventanas. La Comisión Europea está trabajando en esa idea a través de la promoción de la rehabilitación de edificios para hacerlos más eficientes energéticamente. En España, se espera que, gracias a estas rehabilitaciones, el consumo energético medio de los hogares españoles baje en un 37% de media.
Elegir las ventanas adecuadas es muy importante, como también lo es que estén instaladas correctamente. Por ello, lo mejor es dejarse aconsejar por los profesionales, que valorarán cuál es la mejor opción según las características y la localización de nuestro hogar. La diferencia, por ejemplo, entre usar PVC, que es un material con un altísimo aislamiento térmico, o aluminio puede ser muy notable. Sin embargo, dependiendo de dónde vivamos, puede que no siempre sea necesario utilizar PVC, ya que el aluminio también nos ofrece soluciones eficientes.
Otro punto importante para ahorrar en la factura de la luz es aprovechar bien las posibilidades que nos ofrecen las ventanas para la climatización natural de los espacios, lo que nos ayudará a reducir el uso de la calefacción y/o el aire acondicionado. Una buena ventilación o utilizar las persianas y otros complementos para dejar entrar el aire, la luz y el calor o, por el contrario, para reforzar el aislamiento del hogar, contribuyen al ahorro energético mucho más de lo que pueda parecer.